Cerezos y dragones (Con Kiku Honda)

... bien... heme aqui: en el aeropuerto internacional de Japon...

-Y ahora que? -me sente en una de las sillas de espera -Veamos... -saque unos papeles de mi maletin, buscando la informacion que me habia dado mi Jefe -Se supone que debo verme con Honda-san para establecer buenas relaciones entre UK y Japon

Suspire largamente: esto es trabajo de Arthur, ¿por que tengo que hacerlo yo?

... precisamente por culpa de él: hablo "cosas" de mi y resulta que comenzo a caerme trabajo "social" por todos lados... ¿que hice para merecer esto? Lo que menos me gusta es hablar con la gente y ahora se supone que DEBO hacerlo...

En fin...

-Deberia estar aqui pronto -mire mi reloj - Nuestros jefes acordaron que nos encontrariamos aqui... bueno, al menos ahora sí que le dieron a Honda-san mi descripcion fisica

Estaba en el aeropuerto desde varios minutos atrás, ya que no le gustaba ser impuntual. Según el acuerdo que sus superiores le habían entregado, un representante del Reino Unido vendría a establecer relaciones diplomáticas con él. Lo extraño en todo esto es que no seria Arthur Kirkland, si no uno de sus hermanos, Glen Kirkland, el representante humano del estado de Gales quien vendría en la representación de ellos.
Luego de debatirse el si lo encontraría, sacó el cartel que había hecho la noche anterior, el cual en un ingles entendible tenía el nombre de este, y con la esperanza de que lo viese, se dedico a caminar por el lugar.

-espero encontrarlo pronto, no valla a ser que se moleste- se cuestionó mentalmente, hasta que vio a un pelirrojo sentado, con cara de frustración. Se acercó tratando de llamar su atención –Disculpe… ¿es usted Kirkland Glen-san? – pregunto, rogando por no equivocarse. –yokatta! – tocándose el pecho en señal de alivio- creí que no podría encontrarlo tan rápido…por acá por favor –mientras le señalaba el camino, le ayudo con una de sus maletas hasta llegar a un taxi, el cual los llevaría a su propia casa.

Por fortuna, el taxi no demoro mucho, así que al llegar, bajaron del automóvil, y caminaron un poco hasta una casa de aspecto antiguo, muy tradicional. Lo dejo entrar primero, y seguido entró el, se quitó sus zapatos y avanzó dentro de su residencia a la cocina a preparar té. –e...etto, Kirkland-san, ¿le ofrezco algo de té? –mientras le indicaba por donde ir. Al llegar a la sala de estar, le ofreció asiento, mientras él traía una bandeja con dos tazas y la pequeña tetera de porcelana.

De repente alguien me llamo por mi nombre...

-Bueno, al menos no tuve que esperar mucho - pense aliviado - Si, soy yo - respondi sencillamente

Pronto Honda-san me guio fuera del aeropuerto y tomamos un taxi. El camino lo recorrimos en silencio, pero fue algo que verdaderamente me gusto: asi pude apreciar con tranquilidad las calles de la ciudad, la gente, los anuncios, los edificios y aquel extraño colorido que inundaba el lugar...

... esta es una de las pocas cosas que me agrada de tener tanto trabajo en el extranjero: puedo ver nuevas ciudades y apreciar lo exotico de cada lugar

No tardamos mucho para llegar a su casa; Honda-san me dejo entrar primero y me llevo a la sala de estar mientras él preparaba algo de té... afortunadamente ya conocia lo basico de las costumbres de Japon (cortesia de un informe personal que me escribo Arthur) pero lo mejor era ir con cuidado: no queria molestar a mi anfitrion

Él regreso y me ofrecio té

-Si, gracias - tome la taza y bebi un poco - ... sabe bastante bien - sonrei ligeramente - Gracias, Honda-san - él se sento justo en frente de mi - Lamento que Arthur no haya podido venir, pero tenia trabajo pendiente

Esta casa es bastante agradable: callada, tranquila, con un aire de misterio y comoda... entiendo por qué a mi hermano le gusta tanto venir aqui

-Este chico, Glen-san, es bastante callado- pensó a la vez que se servia a si mismo la aromatica bebida caliente. –pero en parte me tranquiliza-; al ver la reaccion de su invitado, sonrio, pero creyó mejor no decir de donde provenía aquella bebida. Luego, retomando el sentido del viaje, se decidio a hablar. –Kirkland-san, disculpe si es muy apresurado –dijo, a la vez que inclinaba un poco su cabeza- demo, quisiera saber el motivo en concreto que lo trajo hasta Nihon –a la vez que su voz se perdía tomó la porcelana y bebió un sorbo- ya que como usted mencionó antes, normalmente para los tratados, viene Asa-san o alguno de sus jefes –le observó un momento, para esperar su respuesta.

Al ver que su pregunta estaba siendo mas directa e incomoda de lo que debía, se precipitó a hablar por segunda vez – D..demo, no es necesareo que conteste ahora…mas bien, debería mostrarle lo básico…verá mi casa no es tan grande como los castillos de Asa-san, o glamorosos como la de Francis-san, es más, es un poco mas pequeña y rústica –dijo, algo avergonzado de si mismo y un poco cabizbajo- pero es cómoda. Kocchi desu –dijo, levantandose e indicandole el camino, hasta llegar a un pasillo, con varias puertas normales – puede elegir la que más le acomode –a la vez que le sonreía muy levemente, pero dando a entender la gran hospitalidad de su casa.

Esperó a que se decidiera, y al ver un gesto de aprobación del peli-cobrizo, fue por una de sus maletas, para acomodarlas en el cuarto. –Por cierto- aclarandose la voz- vivo solo, por si le comentaron que habia alguien más.- procedió a hacer una reverencia y retirarse del cuarto, para que se instalase con tranquilidad, a lo que él se iba a preparar la cena.

Lo escuche con tranquilidad: me agradaban las personas que iban directo al punto cuando se trataba de trabajo... no puedo decir lo mismo en cuanto a coss personales, pues normalmente significan problemas para mi...

Cuando iba a responderle se retracto... aunque tampoco me extraña: seguramente penso que estaba siendo demasiado directo. Pense en tranquilizarle, pero me contuve porque no queria ofenderlo

Atendi con diversion acerca de lo que dijo sobre la casa de Arthur y Francis... vaya que eran excentricos, pero que su hogar no sea igual no significa que sea incomoda: al contrario, lo poco que he estado me he sentido muy tranquilo. Me atreveria a decir que demasiado, pues me desagrada lo excesivo o lo innecesario en una casa

Me guio al pasillo y permitio que escogiera mi habitacion, indicandole una cerca de la salida al jardin. Enseguida recogio mi maleta y la llevo ahi, diciendome algo acerca de que vivia solo... cosa que me hizo reir interiormente: seguro que Arthur lo espanto cuando hablaba con las criaturas

... es un poco triste que casi todos los paises se hayan olvidado de esos seres que le ayudaron mucho, pero no se trata tampoco de culparlos: los tiempos cambian. Mi hermanito nunca le ha importado eso, sin embargo se necesita ser prudente

...

Cuando me halle solo me di el lujo de acostarme en el amplio cuarto, mirando la pequeña lampara que colgaba del techo... Pero no habian pasado ni 5 minutos cuando escuche una risa...

... Honda-san no se rie asi... y si ya dijo que vive solo, quiza se trate de...

...

Me levante y atrevi a asomarme al patio, viendo que por ahi corria una niña de bonito kimono rosa. Me sonrio y le devolvi el gesto, aunque no me atrevi a hablar con ella: necesito ser prudente en una casa donde soy invitado

Hola!! Este, sigo siendo yo, el anterior user de Gales "Tetzuro, Tetzu o Zet" xDU. Lamento si parece que se quitaron todos mis post, pero hubo un error administrativo y bueno, tuve que crear la cuenta otra vez

Seguiremos como tal, nada mas pongo esto para que estes enterada xDU

hai! wakarimashita, y no hay problema~ trataré de responder luego ;u;

dejé que se acomodara en la habitación, y me retiré a la cocina para darle su espacio de privacidad y un momento de descanso despues del largo viaje. Aún sigo extrañado de que Asa-san no haya venido, quizas algo le haya pasado, me preocupa...creo, que lo llamaré mas tarde... ahora debo comenzar a preparar la cena, no quiero que mi invitado pase hambre ni nada.

Comencé a pensar que podría preparar, luego recordé un libro que me regaló Asa-san. Me senté en el tatami y hojee un poco el libro, y al no encontrar nada adecuado, decido que es mejor preguntarle que es lo que prefiere de comer.

Me levanté y comencé a acercarme al cuarto donde se alojaría, pero me detuve en la puerta al escuchar unos pasos, de seguro debe estar arreglando su ropa o inspeccionando la habitación. Toco levemente la puerta -Shitsurei Shimasu, Kirkland-san - abro la puerta y entro - etto -lo vi observando el patio, me parecio algo extraño, pues en esta fecha no es tan bonita la naturaleza en japón- sumimasen, demo....que le gustaría cenar? -pregunté cabizbajo, algo avergonzado y sonrojado, pues no es algo que uno pregunte a diario cuando vive solo, no?. me quede observandolo en busca de respuesta, y recíen me pude fijar detalladamente en él, sus faciones, finas pero maltratadas, y su cara calmada, sus ojos algo inexpresivos y a la vez misteriosos. aun me sigo cuestionando el por qué vino, aunque no le presionaré para que me aclare.

No respondi ante el llamado a la puerta: seguia viendo el patio buscando con la mirada al causante de esas inocentes risas. Cuando me di cuenta, Honda ya estaba asomado en la puerta y me preguntaba que queria cenar.

Era una buena oportunidad para probar algo de comida japonesa autentica, ya que alguna vez Arthur me habia comentado que sabia muy bien y que no solo estaba el tipico sushi. Voltee a verlo para responder, pero note que me miraba un tanto escrupuloso... como si estuviera poniendo mas atencion en mi rostro que antes...

Bueno, no me molestaba: era natural dado que era la primera vez que me conocia. Yo tambien tenia curiosidad por verlo mejor, pero seria descortes dado que era el invitado. Ademas, realmente no era necesario: ya habia visto lo que me interesaba (sus ojos, que parecian ausentes y carentes de brillo, aunque no vacios), asi que no habia necesidad de mas

-Lo que usted guste, Honda-san - dije desde mi lugar con voz clara, neutral, tranquila pero un tanto inexpresiva - Es un gusto siempre probar comida nueva

... Ahora que lo recordaba, Honda y mi hermano eran buenos amigos, asi que tal vez sea bueno excusarlo de su ausencia

-Arthur no pudo venir debido a que tenia trabajo pendiente en la oficina -seh, eso medio cierto: no iba a decirle que había hablado tan bien de mí con su Jefe que hasta me habia "subido de rango" (por decirlo asi). No sabia si me alegraba o no - Se encuentra bien y le manda muchos saludos -eso sí era cierto - Lamento las molestias, Honda-san

al sentir su voz, volví al mundo, por así decirlo - hai! pero de todos modos, me gustaría que me hiciese saber si desea alún bocado en especial, igual con los detalles de su estancia, ne?- ya mas seguro. debo agregar que me encanta cuando las personas son sencillas, y honestas, y Kirkland Glen-san, lo parece.

-Iie, no es ninguna molestia Kirkland-san, por el contrario, es un gusto que esté aqui. Muchas gracias por el recado de Asa-san y disculpe el haberlo presionado para que me aclarara. Aparte de que Asa-san me ha comentado algunas veces como son sus hermanos- dije, aunque no le iba a comentar todo lo que me ha confiado.

-Shitsure ichimasu, Kirkland-san, iré a preparar Ramen para esta noche. esta algo fría y algo calientito es bueno - salí, cerre la puerta, caminé unos pasos y me devolví- Por cierto! no es necesareo que sea tan formal en la forma de llamarme, puede decirme como guste - dicho esto, fuí a la cocina y comenzé a preparar los platos de ramen.Luego de unos varios minutos, ya empezaba a oler delicioso. -espero le guste-

Detalles de mi estancia... bueno, no tenia demasiadas dudas ni puntos que agregar a eso... puede que no lo parezca, pero me gusta mucho no tener planeadas "ciertas cosas" para que todo fluya espontaneamente y me provoque una verdadera sensacion de sorpresa, asi que no le pediria nada en especial a Honda

Sonrei con ligereza al oir su respuesta con lo que le dije de Arthur... pero Asa-san? Por que le llamara asi? Esperaba saberlo conforme pasaran los dias, y claro que no me habia presionado! Solo era un comentario que era necesario para la situacion, asi que no entendi muy bien por que se disculpaba... aunque no dije nada, ya que no queria iniciar una conversacion sin sentido...

Y mi "querido" hermano a hablado de nosotros? Ha~ seh, tenia que quejarse con alguien, no lo culpo: podemos llegar a ser frustrantes... pero me dio un poco de curiosidad saber que habia dicho de mi a pesar de que sabia perfectamente que debio comentar algo como "Es un antisocial inexpresivo". Rei un poco por mi propio pensamiento

Y luego de que se retirara despues de darme permiso para hablarle con mas "familiaridad", volvi la vista hacia el jardin, buscando con la mirada el que habia hecho aquellas risas... no vi a nadie, pero ahora se apreciaban pasos de cuando corrias...

Me atrevi a salir a sentarme sobre el fino piso de madera afuera de mi habitacion, apreciando la diferente vegetacion, el cielo y ese aroma tan fresco que se distinguia