Afortunado accidente [Privado con Kiku Honda

Las clases habian terminado hace ya un buen rato y a el le habia toado ir al salon de maestros a revisar nominas y a escuchar queja tras queja de los regulares alumnos problematicos. ¿Que punto tenia todo esto? Si aunque siguiera a esas molestias andantes por todo el colegio de todos modos no le escucharian y volverian a crear problemas en sus respectivos salones.

Pero bueno... al menos se ganaba creditos extra y varios beneficios asistiendo a los profesores, y vaya que podia tener paciencia haciendolo, pero habia veces que simplemente lo sacaban de sus casillas. Como ahora, que estaba en los pasillon con una pila enorme de examenes que tenia que fotocopiar y que dificilmente le dejaban ver lo que fuera que tuviera adelante.

-Juro que algun dia voy a renunciar... y ya van a ver, no van a encontrar a otro conejillo de indias que explotar como yo y---¡FUCK!- Sin querer habia chocado con algo o alguien y habia terminado en el piso con todos los papeles desparramados a su alrededor y un fuerte dolor en la base de la espalda

-Maldicion... ¿Que fue lo que...?- Mira hacia adelante y se da cuenta de que habia un chico frente a el tambien y de inmediato su rostro se torno algo rojo por la verguenza- ¡O-oye! ¡¿Estas bien?!-

Ya había salido de clases y con mucho pesar se dirigía al salón de maestros, necesitaba preguntar algunas cosas, ya que hace no mucho se había transferido a el colegio, algo molesto, y como aún no conocía a nadie, la mejor opción era ir a hablar con algún tutor.

Tenía su reproductor a un volumen moderado-alto, y caminaba distraídamente por los pasillos, viendo y admirando la hermosa arquitectura del lugar –realmente es bello- dijo distraídamente, mientras avanzaba lenta y descuidadamente por el lugar. No muchas veces tenía la oportunidad de admirar las cosas que le rodeaban, y no desaprovecharía esta, hasta que, después de unos tantos giros con la cabeza inclinada hacia arriba, chocó con algo, mas bien con alguien, cayendo al piso y mareándose un poco, se sentó y quitó los audífonos, dándose cuenta de que había chocado con un rubio chico, y que habían papeles volando en el aire aún.

-Y…Yo…..lo lamento! –dijo disculpándose automáticamente y ruborizándose mas de lo que esperaba- ah? Sí, estoy bien, muchas gracias, ¿y usted? ¿No se lastimó? –preguntó tímidamente y reaccionando comenzó a recoger los papeles que había botado- Lo lamento! No era mi intención botar sus papeles – bajando la cabeza y apilándolos en un montón- por cierto….¿c…cual es su nombre? –preguntó, luego de armarse de un valor que desconocía hasta entonces y titubear un poco.

-No, creo que estoy bien...- Le dijo mientras cerraba los ojos y se llevaba una mano a la parte baja de su espalda. No es que le doliera extremadamente, pero si le molestaba un poco tras haber caido exactamente sobre ese punto. Recordo los papeles que deberian estar hechos un desastre a su alrededor y abrio los ojos para disponerse a recogerlos pero le sorprendio que el otro chico ya se le habia adelantado en esto y tenia varios reunidos en un monton frente a sus ojos.

-¡Hey no! Descuida... yo puedo hacerlo, fue mi culpa despues de todo...- Se arrodillo frente a el y le ayudo a juntar todos los papeles, ya que considerando la gran cantidad de esto les llevaria al menos un buen par de minutos- Enserio lo siento... estaba tan molesto por ser la sirvienta de esos ancianos que no quise molestarme en dar varias vueltas y me lleve todos los papeles conmigo, pero bueno... esto es lo que gano por dejarme convencer de tomar el puesto-Suspiró

Listo. Por fin todos los papeles se encontraban en orden y al parecer el otro chico estaba bien, aunque...¿Era su impresion o estaba algo nervioso?

-Ah, pues... mi nombre es Arthur Kirkland, Presidente Estudiantil y alumno de tercer grado- Levanto la mirada y le vio con algo más de atencion, su rostro se le hacia tan familiar...- Disculpa, pero... ¿De casualidad tu nombre no es Kiku? Creo haberte visto en la nomina de alumnos nuevos...-

Sus rasgos eran marcadamente asiaticos y eran muy pocos los alumnos nuevos que habian llegado desde Oriente este año asi que era muy dificil que se equivocara...

Suspirando de alivio – Yokatta – le sorprendió que a pesar del gran golpe estuviese bien el chico, después de todo llevaba un gran peso en sus manos.

Sin dejar de recoger y tratar de ordenar los papeles con cuidado, escucho que el peli-rubio le dirigía la palabra. – No, discúlpeme usted por chocar tan repentinamente -. Termino de recoger las últimas hojas que quedaban y las apiló en una pequeña torre- listo- se fijó en que el otro lo observaba demasiado para su gusto y agachó la mirada, después de todo, nunca le gusto ser muy observado.

Se sorprendió de que le llamase por su nombre, bueno, luego de saber que era el presidente estudiantil no fue tanto, pero sí el hecho de que lo identificase tan rápido. –H..hai, mi nombre es Honda Kiku, un gusto conocerlo Kirkland-san – saludó cortésmente haciendo una reverencia, después de todo, estaba acostumbrado a la formalidad, fuese la situación que fuese. Y se fijó en él: cabello rubio, no muy alto, pero un poco más que si mismo, ojos verdes esmeralda, bastante profundos, de tez blanquecina y con unas grandes cejas… eso fue lo que más le llamo la atención de él. Y el carácter y desplante que veía. De seguro era muy tomado en cuenta, y por el acento, dedujo que era un anglosajón.

Aún no entendía el porque de que le observase tanto, pero decidió obviar eso. –Disculpe Kirkland-san, ¿puedo ayudarle a llevar esas hojas? – preguntó, ya que en verdad era una ruma muy grande, y de paso aprovecharía de preguntarle algunas cosas, para no perderse en el gran recinto que era el colegio y tratar de socializar un poco, cosa que no le agradaba mucho, pero debía hacer si no quería ser tratado igual que en su anterior casa de estudios en Japón.

Y ahi iba aquel gesto tan caracteristico y lindo de ellos los orientales, esa timida pero educada inclinación de la cabeza signo de su infinita y perfecta educación. Sonrio a gusto por ella y le observo un instante más, me pregunto si le molestara pero...siempre he tenido esa pequeña mania de analizar a quienes tengo enfrente, ¿Y el? Wao... desde el primer momento en que le hablo que comenzo a sentir curiosidad por el.

-¿Estas seguro de eso?- Le pregunto tras oir su proposicion, si ya el tenia que hacerse cargo de tareas tan inutiles como esa, menos queria arrastrar a otra persona consigo, o bueno... si, le gustaria llevarse a un frances consigo en aquel castigo pero ese no era el punto, no queria molestarle- Enserio nos llevaria un buen rato cargar todo esto y sacar las fotocopias... aparte de que estoy esguro de que tenias algo que hacer ahora ¿O me equivoco?-

-H…hai, Kirkland-san…dejeme ayudarle onegai – a la vez que agachaba un poco la cabeza por segunda vez. La segunda pregunta que hizo, lo dejo un poco helado, ya que creía no se notaría que iba a la sala de profesores…bueno; ya que un estudiante como él le habia dirigido la palabra, no dejaría pasar la oportunidad, aunque algo de vergüenza le daba – Iie, la verdad….bueno, me dirigía a la sala de profesores a pedir algún tipo de guía, ya que soy nuevo aquí, pero….a decir verdad, me avergüenza un poco ir a molestar a los tutores –agachando su cabeza, sintiendo como sus mejillas levemente se enrojecían y acaloraban. – P…pero no me molestaría ayudarle, ya que se nota muy pesado y peligroso que valla con esa ruma de hojas, no valla a ser que alguien tan distraído como yo choque de nuevo con usted – dijo, riendo levemente. Le causaba gracia el haber chocado tontamente, tal cual una situación común en un anime gakuen.

Sin decirle mas, tomo un montón de hojas en sus manos y se levantó, seguidamente espero a que el peli-rubio reaccionara y se levantara también. De por si era bastante raro que me decidiera tan repentinamente a hacer algo sin pensarlo debidamente, pero….no sería malo un pequeño cambio, ¿no?. – Etto…Kirkland-san…¿hacia donde debemos ir?- pregunté bastante avergonzado, pero decidido. Esta vez, no me dejaré ser intimidado por las dudas.

Con que...¿Nuevo aqui? Hm...eso era algo raro, ya habian pasado un par de dias desde el inicio de clases y se supone que a todo nuevo estudiante se le habia asignado un guia para que el mostrara los puntos principales del Intituto y las normas basicas para que no se metiera en problemas... a no ser de que por haber estado distrayendose con Feliciano se le hubieran escapado un par de nombres de la lista...

En resumen: o resolvia esto ahora y sin que se enteraran los maestros o reverendo grito que le iba a llegar de parte de la administración...

-Bueno...creo que has tenido algo de suerte entonces, parte de mi trabajo es ayudar a los nuevos a ubicarse dentro del Instituto, asi que si llevamos esto rapido podria comenzar a mostrarte el lugar, aunque...¿Puedo saber por que esperaste hasta ahora para buscar algo de ayuda?- Preguntó con la seguridad que tres años de practica arreglando cosas como estas (y mintiendo en otro buen par) le habian entregado.

Aunque antes de siquiera poder recibir su respuesto tuvo el agrado de escuchar la ligera risa de su compañero... Dios, tenia que admitir que eso habia sido encantador... a-aunque claro que no lo iba a decir abiertamente pero... agh, ahi iba el pensando cosas estupidas otra vez... sacudió ligeramente el rostro y se levanto para tomar el monton restante de hojas y mirar hacia el corredor.

-Es por aqui...tenemos que ir a la biblioteca para sacar las fotocopias y de ahi devuelta a la oficina a dejar todo esto-

Le dijo mientras comenzaba a avanzar por el pasillo, pero tra sun par de minutos pudo notar el silencio que los envolvia a ambos. No es que eso a el le molestara, pero se imagino que el otro estaria algo nervioso por esto...

-Asi que...Kiku ¿Donde dijiste que estudiabas antes?-